diciembre 24, 2013

Nunca, siempre.

Por Abraham Ramírez



     Nunca...
     Siempre...

     Hasta ahora, creo que algunas ocasiones has usado mal esas dos palabras.  Las aplicas sin restricciones al hablarme, sin saber lo que provocarás o sin que te importe aún sabiéndolo.

  • Nunca me has querido como yo a ti.
  • Siempre me quedas mal.
  • Nunca me escuchas.
  • Siempre te vas.
  • Nunca te quedas.
  • Siempre me fallas.
  • Nunca regreses.
  • Siempre es lo mismo.
  • Nunca le atinas.
  • Siempre la riegas.

     Y podría continuar con la lista, pero no es el chiste de esto que recuerdes tus frases ni que me las vuelvas a decir, sólo quería hacerte notar dos cosas:

  • Siempre, desde que te hiciste necesaria para mí; te he querido con un amor más comprometido y puntual que la puesta del sol o el fin de año.  Está allí aunque a veces no lo quieras ver o necesitar.  Aunque en ocasiones te canse o te estorbe, porque sé que cuando te aburras de ser tan dolorosamente autosuficiente, puedes querer estar conmigo, necesitarme; y me gusta estar ahí para ti.  
  • Nunca te he ignorado.  A veces trato de ser fuerte, para que tus arranques peleoneros no me duelan, pero por favor cariño, no confundas mi decisión consciente de permitirme elegir que algo me dañe o no, con ignorarte.  Nunca he querido hacerte daño.  Sé que te he hecho sentir mal sin querer, porque no soy perfecto, pero no me digas que siempre te fallo o que nunca te he querido como tú mereces.
     Nunca y Siempre son dos palabras demasiado definitivas y abarcantes, por eso preferiría no usarlas contigo.  Pero si alguna vez me viera obligado a hacerlo, quisiera que explicaran de forma exacta y sencilla lo que eres para mí, que fuera en frases tan sentidas y sinceras como estas:

  • Nunca me canso de escucharte y conocerte.
  • Siempre me gustas.
  • Nunca dejas de ser interesante.
  • Siempre logras sorprenderme.
  • Nunca dejes de ser tan admirable.
  • Siempre llenas lo que tengo vacío.
  • Nunca dejas de crecer.
  • Siempre que lees me gusta estar ahí e imaginar.

    Nunca olvides que te amo para siempre.  


     

1 comentario:

  1. Muy cierto y muy bonito! Como todo lo q haces, me encanto! Nada es nunca ni siempre. Besos!

    ResponderEliminar